Para garantizar la salud y el bienestar de sus pasajeros, SwissAir sirve café y té recién preparados en sus aviones de pasajeros. Con este propósito se han instalado en un jumbo hasta 20 máquinas de café y hervidores de agua. El agua utilizada puede contener más o menos minerales dependiendo de la ubicación del aeropuerto. Por razones de espacio y peso, es imposible montar una instalación de descalcificación. Además, si el agua se tratase, afectaría al sabor del café y del té. Por eso, las máquinas de café y los hervidores se descalcifican a intervalos regulares en el taller de aeronaves de la sede principal. Los procesos de neutralización y pasivación posteriores garantizan la eliminación de los restos de productos descalcificadores y sirven para proteger la instalación.