La nueva electroválvula GEMÜ M75 compensa las fuerzas de presión mediante el principio de doble fuelle
La compañía especializada en válvulas GEMÜ lanza al mercado la nueva electroválvula de proceso GEMÜ M75 con descarga de presión, que, gracias a su innovador principio de doble fuelle, permite compensar las fuerzas de presión. Esto significa que la nueva válvula puede utilizarse con los accionamientos magnéticos compactos en los diámetros nominales disponibles para procesos con una presión de trabajo de hasta 6 bares.
Las electroválvulas se caracterizan por sus tiempos de acción cortos, por lo que son especialmente adecuadas para los pasos de dosificación en tecnologías de mezcla. Ya sea en la industria química, en el tratamiento de aguas, en instalaciones de lavado y limpieza o en galvanizaciones, las electroválvulas apenas requieren mantenimiento y son una alternativa económica a las válvulas accionadas por motor neumático o eléctrico para diámetros nominales pequeños.
La nueva electroválvula de proceso de 2/2 vías de descarga de presión y de acción directa GEMÜ M75 dispone de un accionamiento magnético recubierto de plástico que está disponible para varias tensiones de conexión. La válvula ahorra en recursos gracias a una eficiente reducción de la corriente de parada, mientras que el doble fuelle compensa las fuerzas de presión dinámicas y estáticas. Gracias a una amplia selección de materiales del cuerpo de alta calidad (PP, PVC y PVDF) y a la separación hermética entre el fluido y el accionamiento mediante varias versiones de juntas tóricas, la nueva electroválvula de proceso garantiza un proceso fiable, incluso con fluidos agresivos. La válvula puede utilizarse tanto para fluidos gaseosos como líquidos y es apta para uso en vacío. La compacta electroválvula es apta para aplicaciones de apertura/cierre en los tamaños nominales DN 8 a 15 (con un adaptador, puede ampliarse hasta DN 20).