El agua sin tratar que llega a la planta depuradora de Niedernhall primero se filtra durante el transcurso de distintas fases de tratamiento mediante una ultrafiltración, se reduce la dureza mediante un intercambiador iónico y, a continuación, se sanea mediante desinfección por UV. La planta trata 300 m³ de agua cada hora, lo que equivale a 2,2 millones de m³ al año. La particularidad de esta planta gestionada por el consorcio de abastecimiento de agua del nordeste de Wurtemberg es el intercambio iónico que tiene lugar en el proceso CARIX® (Carbon Dioxide Regenerated Ion Exchangers). Las ventajas más destacables de este proceso son su bajo coste operativo y que es respetuoso con el medioambiente.